¿Cómo aprendemos a leer? ¿Cómo enseñarlo? Existen diferentes métodos para aprender a leer que son usados de forma habitual en las escuelas.
Para algunos niños, aprender a leer puede ser un proceso muy pesado o difícil que genera frustración y rechazo a la lectura en el futuro. En muchos casos, esto se debe a las prisas del sistema para empezar en la lectura, priorizando la agenda escolar antes que la propia madurez del niño. No todos están listos al mismo tiempo y no todos necesitan practicar la misma cantidad de tiempo para aprender.
¿Qué es leer?
Leer se refiere a un proceso de decodificación a partir del cual podemos comprender un texto y darle sentido dentro de un contexto cultural.
Como todos sabemos, LEER es una de las funciones más elevadas del cerebro humano. Es además una de las funciones más importantes de la vida, dado que prácticamente todo aprendizaje se basa en la habilidad para leer. Leer bien en los primeros años de escolarización puede condicionar el futuro.
Habilidades necesarias para aprender a leer
En el proceso de la lectura y la escritura son necesarias unas capacidades que se van desarrollando durante los primeros años de vida. Tienen que estar listas antes de poder dar el salto cognitivo para aprender a leer.
- Conocer el lenguaje con un vocabulario rico.
- Tener una buena discriminación fonológica (los sonidos de las palabras).
- Memoria auditiva.
- Coordinación visomotora.
- Una buena orientación espacial y lateralidad.
- Función manual fina.
Algunos métodos de aprendizaje de lectura y pre-lectura
Existen muchos métodos para aprender a leer según la edad del niño o la niña. En este post me centro en el aprendizaje temprano de la lectura. Mi perspectiva de abordaje es el neurodesarrollo, seguir las pistas que me da la madurez neurológica, física y emocional del niño o cómo aprende su cerebro en la etapa en que está en ese momento.
Por mi experiencia, se que aprendemos de forma globalizada a hablar y a convivir, básicamente por modelado. Nadie nos pone en un escritorio y nos explica de forma secuenciada y lógica como tenemos que hablar, caminar o entender. Simplemente lo hacemos. Hasta los 36-48 meses el cerebro aprende así de forma global. A partir de este momento, empieza a definirse más la especialización hemisférica y la dominancia lateral. Algunos niños permanecen más en este periodo global y necesitan más tiempo para pasar a la siguiente etapa (en especial, si ha habido algún problema madurativo, físico o sensorial).
Es por ello que, en esta etapa, no es recomendable aprender a leer. Pero si se hace, debe enseñarse con un método globalizado.
Método global
Uno de los métodos educativos que más he disfrutado con los más pequeños (de 0 a 3) es el Método de Lectura Global y precoz de G. Doman ya que se acopla perfectamente a las necesidades de los más pequeños. No se dan cuenta de que están leyendo y no altera el proceso madurativo en otras áreas.
Con el método Glenn J. Doman los niños pequeños pueden aprender a leer palabras y párrafos exactamente igual que aprenden a entender las palabras habladas, las frases y los párrafos. Cuando el oído capta, o recoge, una palabra o mensaje hablado, este mensaje auditivo se rompe en una serie de impulsos electroquímicos que son enviados al área auditiva del cerebro, que los decodifica y comprende en lo que se refiere al significado que la palabra intentaba transmitir.
Es uno de los métodos para aprender a leer de forma más precoz. La característica principal es que se inicia a los 2 – 3 años. Las tres primeras palabras serán papá, mamá y el nombre del niño. El resto, hasta quince, deben ser los términos más familiares y placenteros que le rodean: nombres de los miembros inmediatos de la familia, parientes, animales domésticos, alimentos favoritos, objetos y actividades preferidas. No se puede incluir una lista exacta porque son muy personales.
Para anotar las palabras serán necesarias tarjetas blancas de 15 cm de altura por 50 cm de longitud. La letra debe ser muy clara, de 12 a 14 cm por 10 cm y con 1,2 cm entre ellas; y en color rojo y minúsculas. Utilizaremos siempre rotuladores gruesos.
Otras ventajas
- Mejora el vocabulario y ayuda a estructurar la información por categorías.
- Lo aprenden sin esfuerzo y lleva muy poco tiempo al día.
- Se puede hacer en formato digital.
- Aprenden a través de dos entradas sensoriales: el oído y la vista.
- Los contenidos pueden ser muy variados y centrados en el entorno del niño, lo que puede llegar a ser altamente motivador.
Método fonético
El método fonético es otro de los métodos para aprender a leer. Este se aplica en muchas escuelas a partir de los 4 años y se acompaña también de gestos para cada uno de los fonemas de las palabras. Es un sistema de prelectura que ayuda a los niños a asociar el sonido con la letra y así enlazar palabras. Tiene bastante éxito y también se usa en niños con dificultades de aprendizaje. Su creador fue Juan Amos Comenio que en (1658) publicó el libro Orbis Pictus (el mundo en imágenes). En él presenta un abecedario ilustrado que contenía dibujos de personas y animales produciendo sonidos onomatopéyicos. Por ejemplo, aparece el dibujo de una oveja y seguidamente dice: la oveja bala bé, é é, Bd. Con este aporte, Juan Amós Comino contribuyó a facilitar la pronunciación de las grafías consonantes, principalmente de aquellas que no poseen sonoridad; permitiendo que se comprendiera la ventaja de enseñar a leer produciendo el sonido de la letra y no se nombra.
Ventajas
- Es más sencillo y racional.
- Evita el deletreo.
- Se adapta con facilidad al castellano por ser éste un idioma fonético. La escritura y la pronunciación son similares, se lee tal como está escrito.
- El alumno lee con mayor facilidad ya que el enlace de los sonidos es más fácil y rápido.
- Se aumenta el tiempo disponible para orientarlo a la comprensión de lo leído.
Desventajas
- Es sintético, va de las partes al todo y por consiguiente está contra los procesos mentales del aprendizaje.
- Por ir de lo desconocido (el sonido) a lo conocido (la palabra), está contra los principios didácticos.
- Para atender los sonidos, las sílabas y el desciframiento de las palabras descuida la comprensión.
- La repetición de los sonidos para analizar lo convierte en un proceso mecánico, restando con ello el valor al gusto por la lectura.
- Requiere que el profesor domine el método y prepare material de apoyo, como láminas que posean imágenes que refuercen el aprendizaje del fonema.
En el idioma castellano este método tiene ventaja, ya que la mayoría de los fonemas solamente poseen un sonido.
Método silábico tradicional
El método silábico se les adjudica a los pedagogos: Federico Gedike (1779) y Samiel Heinicke. El método se define como el proceso mediante el cual se enseña la lectoescritura y es el método por el que todos hemos aprendido a leer.
Consiste en la enseñanza de las vocales, las consonantes y después se va cambiando formando sílabas y luego palabras. Es el más utilizado en las escuelas de metodología tradicional a partir de los 4 años.
Algunos de estos métodos para aprender a leer pueden ser complementarios o usarse según el momento evolutivo del niño.
En general, lo ideal sería empezar a aprender a leer cuando el niño está lo suficientemente maduro para hacerlo. Antes de esto, desarrollar las habilidades previas que son necesarias para hacerlo rápidamente y sin problemas como las que hemos comentado con anterioridad como: un vocabulario rico, una buena discriminación fonología, una buena memoria auditiva o coordinación visomotora, etc.
Si esto no es posible, entonces adaptarse al nivel madurativo del niño y enseñar este proceso lector de la forma más natural tal y como su cerebro lo procese mejor.
“El método debería adecuarse al niño, no el niño al método”.
En Kokoro proponemos actividades gamificadas y rápidas que se adecúan a la edad del niño para hacerles este proceso lo más atractivo y divertido posible.