Como ya sabemos todos, a los niños les encanta expresar su lado creativo de tantas maneras como les sea posible. Algunas están bien, y otras no tanto, la verdad. Un ejemplo del segundo tipo de expresión artística sería el temprano desarrollo del amor por la pintura. O sea, lo que viene siendo pintar las paredes.
Empecemos con una pregunta que te hará cuestionarte absolutamente toda tu vida: si pudieras pintar las paredes, ¿no lo harías? Porque nosostros sí, de cabeza. Así que, ¿por qué no dedicar una pequeña parte de tu hogar a esta actividad? No solo será divertido para los más peques, sino que para los adultos también. Solo necesitarás una cosa: pintura de pizarra.
¿Qué es eso de la pintura de pizarra?
Es un tipo especial de pintura que convierte cualquier superficie en pizarra. Auténtica magia negra en lata. Puedes comprarla hecha, o prepararla tú mismo/a si tienes el día Pinterest. Nosotros elegimos la primera opción porque no confiamos en nuestras habilidades de DIY hasta tal punto.
Una vez tengas la pintura, ¡las opciones son prácticamente ilimitadas! Queremos compartir contigo algunas de nuestras ideas favoritas, esperamos que te sirvan de inspiración:
1. La habitación mágica
Pinta una de las paredes de la habitación de tu hijo/a con pintura de pizarra y déjalo/a crear su propio mundo dentro de su cuarto. Un día puede ser un castillo, al día siguiente un barco, un bosque… ¡quién sabe!
También es una gran solución para cuartos compartidos, sentirán que los dos tienen su propio espacio, decorado a su gusto, dentro de la misma habitación.
2. Mesa de dibujo
Y con mesa de dibujo queremos decir “mesa de dibujo”. Pinta la superficie de una mesa de madera con pintura de pizarra y esta se convertirá en un lienzo supercómodo y multiusos. No gastarás papel, y tu hijo/a se lo pasará genial customizando su mesa.
3. Arte de tiza
Cuelga algunos marcos vacíos en la pared que hayas elegido pintar con pintura de pizarra ¡y deja que tu hijo/a haga sus propias obras de arte! Puede pintar paisajes, retratos de familiares… ¡y a la vez servirán de elementos decorativos súper originales!
4. Cajones de pizarra
Esta idea es bonita y muy práctica. Súper útil para asegurarse de que todo el mundo sabe dónde están las cosas.
Además, puedes hasta hacer un juego con los cajones de pizarra. ¿Cómo? Consigue varias pelotas de diferentes colores, o algunos bloques de diferentes formas y haz que tu hijo/a las organice por color y forma en las diferentes cajas. Uno de los juegos de “Kokoro Kids”, ¡pero en la vida real!
5. Puzzle de tiza
Consigue algunos bloques de madera y píntalos con pintura de pizarra. Deja que tus hijo/a los coloque como quiera y luego dibuja algo sobre ellos. Ahora toca deshacer la construcción. ¿Sabrá volver unir los bloques teniendo en cuenta los dibujos que has hecho?
6. Pared-metro
Dibuja una línea vertical en la pared que elijas (con 10cm de grosor bastará), y ve apuntando la altura de tu hijo/a sin dejar marcas –bueno, ya nos entiendes –en las paredes o las puertas. Además, queda precioso y muy original.
¿No te entusiasma demasiado pintar la pared con pizarra?
Bueno, siempre hay un plan B. Estos rollos de papel quedan muy bonitos, son fáciles de montar y le encantarán a tu hijo/a. Como con la pintura de pizarra, ¡puedes comprarlos o montarlos tú!
¿Tienes ya alguna pared de pizarra en casa? ¿Te han pintado ya las paredes por encima de tus posibilidades? ¡Cuéntanoslo en los comentarios!
